El conjunto nacional no ha podido certificar su magnífico ciclo olímpico tras finalizar 10º en la clasificación. La rítmica española no pudo luchar por las medallas pese a la gran temporada realizada.
Matías Sartori | La gimnasia rítmica española dice adiós a París. El conjunto nacional de Alejandra Quereda no pudo expresar en el tapiz en magnífico ciclo olímpico firmando por sus gimnastas Inés Bergua, Salma Solaun, Ana Arnau y las valencianas Patricia Pérez y Mireia Martínez.
Tras el debut de las gimnastas individuales Polina Berezina y Alba Bautista, que finalizaron en la 15º y 20º posición en la fase clasificatoria del concurso completo individual, el conjunto nacional no pudo confirmar el brillante ciclo sobre el tapiz parisino.
Tras la primera rotación, el equipo nacional sumaba 30.100, que tras la reclamación subiría a 30.400 para lograr la 13º posición y obligando a ejecutar un segundo ejercicio sin margen de error.
Posteriormente, las canciones ‘Imagine’ y ‘Let’s Ride’ otorgaron una puntuación de 30.000 en el ejercicio mixto logrando décimo puesto en la clasificación general tras sumar un resultado global de 60.400 puntos certificando su tempranero adiós de los Juegos Olímpicos.
Un desenlace gris para un grupo de gimnastas que venían de un exitoso ciclo olímpico, logrando el bronce del Mundial de Valencia y el oro del Europeo de Budapest, entre otros resultados internacionales.
Alejandra Quereda: “El trabajo previo ha sido muy bueno, pero los fallos te penalizan”
«Tengo pocas palabras en este momento. Me pregunto qué es lo que ha pasado. Todavía no lo hemos asimilado. La preparación y el recorrido hasta llegar aquí ha sido muy bueno. Y el trabajo previo en los tapices de calentamiento estaba siendo bueno, según lo previsto. Quizás fruto de los nervios, no han salido las cosas en el momento. Hemos tenido la oportunidad con el segundo ejercicio y el pase a la final estaba en nuestras manos. Simplemente había que hacer un buen ejercicio sin grandes errores. Y hemos tenido un fallo importante que nos ha dejado sin opciones», explicó entre lágrimas la seleccionadora, Alejandra Quereda.
En referencia a si la magnitud de lo que significan los Juegos Olímpicos pudiera haber multiplicado los nervios o restado a la serenidad del conjunto para el momento de la competición, comentó que «tenemos un equipo joven, aunque con experiencia y muchos éxitos a sus espaldas pese a su corto recorrido juntas. Tanto física como mentalmente estaban preparadas para hacerlo aquí. Por supuesto con nervios, pero con ganas de enseñar todo el trabajo. Pero no es más que otras veces. Realmente, en el Mundial es lo mismo, en el Europeo es lo mismo, y las cosas han salido de otra forma. El deporte es así. Hoy nos toca vivir la cara amarga, digerir esto, asimilarlo, superarlo y seguir trabajando por nuevos objetivos», confesaba.
Puntuaciones muy rigurosas
«En el primer ejercicio, ambas notas de dificultad no nos han parecido acordes a lo que hemos ejecutado en el tapiz. Siempre suele pasar que cuando las cosas no salen y hay fallos es más difícil también para la juez detectar lo que está bien hecho y lo que no. Nos han cambiado la nota, y nos han subido la nota de dificultad de aparato, que para mí estaba un poquito más cerca de lo que se ajustaba a la realidad; la de dificultad corporal no la han subido, tendré que analizar el vídeo. Pero sí pienso que llevando un 11-10 de partida como llevábamos, la nota de 7-5 de dificultad corporal, habiendo tenido un solo fallo en ese apartado ha sido bastante dura. Tendremos que revisar toda la competición en vídeo. La realidad es que si no estamos es porque nuestro trabajo no ha salido. Veníamos aquí a cumplir el objetivo de hacer cuatro ejercicios buenos, nos hemos quedado en dos, y no hemos hecho ni uno ni otro, de modo que nos queda seguir hacia adelante, apoyar al equipo, las chicas ahora van a tener que superar este bache, pero seguro que lo superaremos y seguiremos para adelante con más fuerza», destacaba.
La mirada puesta en Los Ángeles 2028
«Estoy segura de que al final con esto las chicas, que son unas luchadoras, querrán seguir adelante, querrán seguir consiguiendo cosas, seguir trabajando juntas por y para el deporte español, y seguiremos trabajando para estar en Los Ángeles 2028, para estar en esa final y luchar por estar en lo más alto, que es lo que siempre hemos querido»,
«Estoy satisfecha de la preparación que se ha llevado a cabo. Estamos orgullosas de las chicas, de todo el equipo técnico, de cómo ha trabajado, de cómo hemos unido fuerzas y hemos conseguido muchísimas medallas en cuestión de un año de trabajo. Pero primero hay que parar, asimilar todo esto y pensar en el futuro»
Una experiencia para el futuro
«Si estas chicas nos llevan a otros Juegos Olímpicos, que esperemos que sí, esta experiencia les habrá curtido muchísimo, ya sabrán lo que es, que las cosas a veces no salen como uno quiere, y habrá que seguir preparándose. No cambiaría la preparación porque considero que estaba y estoy segura de que este aprendizaje nos servirá para mucho, no solo para los Juegos Olímpicos sino para cada una de las competiciones que tenemos que afrontar hasta entonces»